De nuestro archivo

Estas son algunas de las secciones de "La luna de Canela" en 1971:

"Manualidades y artesanías" (a cargo de Canela)

"Cine" (cortometrajes y dibujos animados)

"Mesa cuadrada" (opiniones de los chicos sobre temas de actualidad)

"Juegos" (competencia donde intervenían los chicos invitados)

"Periodismo" (reportaje a personas vinculadas a la ciencia, la técnica y el arte)

"Mi amigo es un animal" (a cargo de una bióloga que llevaba animales)

"Bailes y canciones" (Canela y Fritz -Jorge Ochoa- cantando; otras personas haciendo coreografías)

"Los enchastres de Fritz" (cocina y experimentos de física y química)

"Aprendamos a mirar" (documentales de Jorge Preloran, comentados por él)

"Teatro y libros" (a cargo de Susana Itzcovich)

"Deportes" (micro a cargo de Juan Carlos Pérez Loizeau)

"Aquí nos conocemos" (hobbies, folklore, música beat, etc.)

"Para mamá cuando llueve" (Canela enseñando a confeccionar objetos útiles)

"Show de Pipo Pescador" (canciones)

"Día destinado a chicos de 3 a 6 años" (cuentos representados por muñecos)                       (TV guía, 7/7/71)

Como puede apreciarse, era un programa educativo, de calidad, y muy variado.

En septiembre de 1970, la publicidad decía:

"LA LUNA DE CANELA - UN VIAJE DE ENSUEÑO PARA VOS"

"Una hora de la mano de Canela, quien con su gracia y simpatía te acercará el mágico mundo de ROBIN, el interplanetario, con sus hazañas espaciales... EL PAJARO LOCO... BUGS BUNNY... y una infinidad de amigos, en cómicos dibujos animados."

"Canela te ha preparado una serie de juegos y entretenimientos con canciones, artesanía, mininoticias, cartelera de espectáculos, discos, personajes, cineteca y correspondencia, que podrás ver de lunes a viernes a las 17.30 por canal 7."

                                                                                                 (TV guía, 16/9/70)

   La serenidad, el aplomo de Canela, es su rasgo público más característico en nuestra opinión. Ese don que siempre tuvo de hablar con claridad y pausadamente nos parece admirable, en una sociedad como ésta que nos deja a cada rato como Lisa Simpson: con los pelos erizados y la piel amarilla (pero del ataque hepático).

   Hay una anécdota sobre esto. En la radio se estilaba hacer entrevistas largas y detenidas; se invitaba a una persona y se la entrevistaba durante todo el programa. Hace unos cuantos años, Canela fue entrevistada en un programa de radio que realizaba un famoso conductor ya fallecido, cuyas iniciales eran A. R. Todas sus entrevistas eran normales, pero parece que ese día se había quedado cautivado con ella y, más que una entrevista, aquello fue un acoso constante. Canela no perdió la calma en ningún momento. Y, al final, a la hora en que se pide la "reflexión de cierre", dijo con su proverbial serenidad algo así como que sentía que su vida, esa noche, había sido como una mesa de ping-pong en la que había estado "devolviendo constantemente la pelota".

   Cuando no la vimos más como conductora en la televisión abierta tuvimos noticias de ella mediante entrevistas donde contaba su labor en la edición de los libros infantiles de Editorial Sudamericana.

  Por otra parte, Canela es socia de Canela Producciones S.A., una empresa fundada en 1998 que se dedica a la producción de contenidos audiovisuales  (medios gráficos, programas de televisión, publicidad). En su sitio de Internet, MEDIOMUNDOTV.COM.AR, aparecen los nombres de quienes integran el staff junto con su foto... ¡de cuando eran chicos!

   ¡Qué lindo! Estuvo Canela con Cristina Mucci en "Los 7 locos" (canal 7, 16/7/11) junto con otros tres invitados. Desde hace años se dedica a la literatura infantil y habló de "La silla de imaginar", un libro que escribió a partir de una silla brotada: era de madera y le habían salido hojitas.

   Otro comentario de color fue que hay libros que vienen de un país lejano y los van haciendo en el trayecto en barco por razones impositivas.

   Dijo que los libros para chicos suelen ser "libros juguete". Esto nos hizo recordar que en los '90 se vendían aquí revistas de Disney impresas en Colombia que tenían aromas, tintas fluorescentes, brillantina, sobrerrelieve, tinta metalizada... ¡Un chiche! Fue la última gran edición internacional de historietas.